Recuerden poner su nombre y apellido, grupo y número de lista al final.
Desde que había llegado a aquel lugar no había parado de preguntarse qué hacía allí. No es que le desagradara aquel sitio: el clima era cálido, el aire perfumaba a lilas, la brisa acariciaba su piel, el verde intenso de las montañas relucía bajo un cielo anaranjado... pero le desagradaba el hecho de que entre el dormitorio de su casa y el espacio en el que se encontraba ahora había nada, el vacío, il nulla, incluso menos que eso; algo completamente inexplicable.
Pero de repente apareció un hombre vestido de negro y encapuchado, la persona que estaba en el cuarto se asustó y por impulso intentó retroceder pero al intentarlo, se dio cuenta de que estaba paralizado inexplicablemente y el encapuchado se empezó a acercar...
ResponderEliminarEl encapuchado ya estaba a menos de un metro, cuando estaban casi tocándose, el hombre se descubrió la cara. Eran exactamente iguales, a diferencia de que el hombre encapuchado se veía más vejo, con algunas canas en su enredado pelo negro y unas cuantas arrugas en la cara, se percibía un olor a tabaco y a un barato whisky escoses, de repente el joven tropezó con sus mismos pies y cayo en el vació, el suelo donde había tocado se ilumino, en eso el encapuchado dijo:
ResponderEliminar-No deberías de asustarte de ti mismo...
(Diego Arellano
2°A
No.1)
Adolfo, te sugiero que vuelvas a leer bien el principio de la historia ya que has incurrido en una incoherencia: ¿dónde se encuentra el personaje, en su cuarto o en otro lugar? Te invito a que reescribas tu historia.
ResponderEliminarYa que calló, el encapuchado se desvaneció. El confundido hombre estaba atrapado en la infinidad del vacío. Todo aquello que lo rodeaba era blanco, no había distinción alguna entre el techo y el suelo. Cuando de repente escucho una grave voz que le decía que se acercara. El hombre no sabía hacia donde dirigirse, ya que la voz llegaba de todas partes. Empezó a caminar hacia adelante hasta que se topó con una moneda. Esta moneda tenia engravada su cara...
ResponderEliminar2ºB 8
Muy buen final Diego
Pero de repente apareció un hombre vestido de negro y encapuchado, la otra persona se asustó y por impulso intentó retroceder pero al intentarlo, se dio cuenta de que estaba paralizado inexplicablemente y el encapuchado se empezó a acercar...
ResponderEliminar(Adolfo Pérez
2B) (Esto es una correccion de mi anterior comentario)
Al desviar la mirada de la moneda, se dio cuenta de que el escenario había cambiado, ahora se encontraba en un valle con montañas rodeando por completo y con un sol de medio día. No sabía que hacer, podría ser un sueño, claro pero jamás un sueño le pareció tan real. Decidió alejarse lo mas que pudo de ese lugar, corría y corría pero por mas que intentaba alejarse de ese valle, parecía que no se movía de sitio. Se lograba ver como pasaba casi volando dejando piedras y pastos atrás pero no lograba comprender por qué las montañas seguían igual de lejos.
ResponderEliminar<(Mi comentario es el de arriba) (Andres Legorreta 2do B no. 13)>
ResponderEliminarNo sabia hacia donde caminar o hacia donde dirigirse solo se encontraba con la moneda de $.25 centavos en su mano y un mundo entero de vacio y montañas hacia donde podría caminar sin ningún fin alguno. El solo quería regresar a donde estaba, el no sabia si eso era un sueño o si era una realidad, unos pocos minutos después observo una luz que se le aproximaba y por instinto siguió esta.
ResponderEliminarManolo roa 2A #16
Inicio:
ResponderEliminarEn este espacio no había nada mas que pelusas y polvo lo cual lo desagrado mucho , haci que decidio salir a ver la ciudad y a pasear un poco por el pueblo , mientras el caminaba estaba pensando que tipo de personas vivian en esta ciudad y se pereguntaba si eran agradables , amables o fastidiosas y odiosas.
En ese momento se detuvo por unos segundos y volteó a su alrededor y vio algo inexplicable algo magnífico.
3-A # 23
La luz se intensificó. De pronto, el hombre se vió envuelto por completo. La cálida luz parecía surgir de todos lados, hacía que el hombre se sintiera desorientado, pero al mismo tiempo, lo invadía una extraña sensación de paz. Se dió cuenta que aquella luz lo hacía sentirse completo, le hacía recordar cuando era pequeño, cuando lo más importante para él eran pequeños detalles. Esos pequeños detalles, como una pequeña palabra de amor por parte de su madre o un fuerte y cálido abrazo de su padre lo hacían sentirse pleno y, al recordar esta sensación, una reluciente lágrima rodó por su pómulo izquierdo.
ResponderEliminarAna Regina Púlito
2ndo B
# 19
Mientras esa lágrima se deslizaba por su pómulo, un extraño sentimiento se apoderó de el. Al mirar a su alrededor, se percató de que se encontraba en el pueblo donde nació y creció. Todo seguía igual en el pueblo, menos el. Un grupo de gente paso caminando a su lado, y el hombre instantaneamente los reconoció. Eran todos sus amigos de la infancia. Todos seguían iguales. Se le hizo raro que nada, pero absolutamente nada había cambiado con los años mas que el. Si ya de por si traía la duda de si todo esto era real, ahora debía cuestionarse si se estaba volviendo loco.
ResponderEliminarPablo Hierro 3A SEC #12
El hombre trato de acercarse a sus amigos, pero ellos lo ignoraban. Fue como si de repente hubiera dejado de existir. Se sintió tan solo que empezó a recordar como era su vida, tan feliz y llena de amor, eso lo puso a pensar en sus padres y su casa. El hombre decidió ir hacia su casa, ahí encontró su cuarto vacio. Nada de sus pertenencias estaban ahí.
ResponderEliminar(Álvaro Martínez Valle 3°A #16)
¿Qué fue lo que hizo que todo cambiara todo? Sólo se había ido de su pueblo natal por unos años, en lo que pasaba la guerra.... Bueno, eso podría ser una explicación a su nueva locura,el haber visto tanta muerte tal vez.
ResponderEliminarEscucho pasos, y al levantar la cabeza encontró su mirada. ¡Sí, era ella! Esos ojos que tanto había extrañado, alguien a quien podía contarle todo.
Camila Gómez Yarza 3A no. lista 8
La mujer caminó hacia el pero no se percató de su presencia. No lo comprendía ¿Por qué no lo veía? intentó tocarla, pero fue inútil. Cada vez que intentaba tocarla su mano atravesaba la imagen de esa mujer, como si fuera un fantasma. El miedo lo invadió. ¿Por qué no podía tocarla? ¿Qué era lo que estaba pasando? La mujer seguía paseando su cuarto y él, al verse incapaz de hacer contacto con ella cayó de rodillas y se echó a llorar.
ResponderEliminarIsabel González Ludlow 3A #10